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Narraciones políticas

Blanca Nieves Palacios
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Blanca Nieves Palacios Barreda

Blanca Nieves Palacios Barreda

Narraciones políticas

La historia de las diversas generaciones de mexicanos, se compone de anécdotas diversas que, por recurrentes, pareciera que a ellas nos vamos acostumbrando aún cuando éstas sean hechas por políticos y nos dañan enormemente como ciudadanos y a nuestro país mismo y de graciosas no tienen nada.

Toneladas de tinta a lo largo del tiempo se han gastado, escribiendo a través de diversos géneros literarios, informando, denunciando, demandando, se ponga fin a dos hechos que son los que tienen a nuestra sociedad dividida entre, los que mucho tienen en abundancia y los que de todo carecen; con una gran ausencia de valores y principios morales que rijan debidamente nuestro comportamiento: la corrupción y la impunidad.

Todavía causa risa, frases dichas por presidentes, como la que dijera aquel político que se eternizó en la presidencia de la República de México, el General Porfirio Díaz,:“perro con hueso en la boca, ni muerde ni ladra”, dedicado mayormente a los periodistas que, a la fecha son conocidos por su fortunas y su servilismo a la autoridad en turno; a los adversarios: “pan y palo”, “mátalos en caliente”; “combatiremos por la causa del pueblo, y el pueblo será el único dueño de su victoria”, “sufragio efectivo y no reelección” y, permaneció en la presidencia 35 años.

Gonzalo de los Santos, político y militar, quien cambiara su nombre por Gonzalo N Santos, Gobernador de San Luis Potosí (1943-1949): “ la moral, es un árbol que da moras” y “encierro, destierro y entierro”, mensaje a sus opositores y/o críticos, hoy denominados “adversarios”.

Al preguntarle a nuestros bisabuelos, abuelos y padres porque votaban por candidatos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) sabiendo que eran deshonestos y rateros, muchos de ellos respondían  que: “porque tenían los colores de nuestra Bandera Nacional”.

En estos nuevos tiempos escuchar las frases de los presidentes priistas como por ejemplo Miguel Alemán: “quisiera que todos los mexicanos tuvieran un Cadillac, un puro y un boleto para los toros”;  a un Gustavo Díaz Ordaz: “estoy orgulloso del año de 1968 porque me permitió salvar al país”, tras la masacre del 2 de octubre;  la de Carlos Salinas de Gortarti: “ni los veo ni los oigo”; refiriéndose a ciudadanos que criticaban sus acciones como entreguista de nuestros bienes nacionales.

Carlos Hank Gonzalez: “ un político pobre, es un pobre político”; Felipe de Jesús Calderón: “yo gané, haiga sido como haiga sido”, tras el fraude que lo llevó a la presidencia de México; Enrique Peña Nieto: “quienes les digan que estamos en crisis, crisis seguramente es la que pueden tener en sus mentes”.

Con esta frase se despidió EPN de México y se fue a vivir a todo lujo a España, país al que varios ex presidentes y ex funcionarios de ellos, han tomado como su refugio seguro, para disfrutar de lo robado al pueblo de México.

En la actualidad y a partir del año 2018 los mexicanos avizoramos un verdadero cambio en el sistema vivido por tan largas décadas de priismo, conjugado con 12 años de panismo (Partido de Acción Nacional), que nos dejaron tras tanto hurto, fraudes y despojo más de 60 millones de ciudadanos sumidos en la pobreza, una violencia difícil de combatir y un fortalecimiento de los cárteles del narcotráfico, posesionados de más de la mitad del país, en complicidad con las autoridades que deberían de haberlos combatido.

Llega Andrés Manuel López Obrador (AMLO), tras su tercer intento y un cúmulo de promesas, que a los oídos de los sufridos y esperanzados mexicanos sonarían a música celestial a través de un Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), conformado con el trabajo y esfuerzo de miles de mexicanos y ¡ganamos!, a ocupar la presidencia y, su primer acto de gobierno es decirnos a los mexicanos que no vivirá en la casa oficial de los presidentes, Los Pinos, cosa muy bien vista por todos sus seguidores.

La humildad lo acompaña se decía, es como el presidente uruguayo José Mújica, vivirá en su casa; pero no, informó que su residencia sería Palacio Nacional, ya EPN, le había dado un recorrido y/o tour por toda su nueva vivienda y desde ahí estaría en contacto con su amado  pueblo a través de sus mañaneras.

En esas mañanera de palacio nacional, AMLO les atiza duro y macizo a quienes le critican o hacen algún señalamiento que no es de su agrado, pero sobre todo, a los que llama sus “adversarios”; en pláticas ciudadanas, formales e informales su pueblo dice: pues que pensaba AMLO que no tendría oposición; inteligencia le ha faltado para conquistarse a sus adversarios.

Tal cual lo ha hecho con el hombre más rico de México, Carlos Slim, concesionario del telmex, de minas, dueño de más de medio centenar de empresas, de Bancos, con quien lleva una muy buena amistad y tiene puerta abierta en palacio Nacional…no así el pueblo.; el sexenio de la esperanza se termina, y aunque no hay dedazo, al decir de AMLO, el mismo ya designó a los candidatos posibles a sucederlo; falta que el pueblo decida democráticamente en votaciones, quién  será su presidente o presidenta y que surja de las bases de la militancia morenistas, no prianistas.

De no ser electo así., democráticamente nuestro candidato, como dijera  mi abuelo, “ahí será p’a la otra”.

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