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La implacable Embriaguez del Universo

La implacable Embriaguez del Universo
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¿Y quién es usted?
Por: José Ruíz Mercado
Jorge Navarro en su periodo de director de la Escuela de Lagos invitó a trabajar
a Alfonso de Lara Gallardo. Invitó a ver la mística de la naturaleza en su vasta
unidad del universo.
El hombre en su destino, convivir con lo natural porque la ontología humana es
la naturaleza misma. Decía con esto estar de acuerdo con Ortega y Gasset, el
filósofo de la estética del devenir universal afirmaba el maestro Navarro.
El maestro Navarro tenía ese don de maestro. A quienes nos tocó charlar con él
siempre salíamos con una apreciación del mundo diferente. Los últimos años,
cuando tenía su estudio en Santa Tere, ese barrio emblemático, cuna de Porfirio
Torres (Postof) y Raúl Bañuelos, leímos, comentamos, acerca de los textos de
estética de los grandes filósofos del arte.
El periodo de la Escuela de Lagos llevó al maestro Navarro al paisaje, a la
abstracción de las figuras de la naturaleza, luego, a un geometrismo sincrético,
colorístico, prueba de ello lo tenemos en el plafón de la Estación Juárez del tren
ligero en Guadalajara.
La relación humana con el medio, más aún, la relación con su medio, los
grandes teóricos lo han señalado. El lenguaje no lo es todo. Se requiere de un
proceso de asimilación, una especie de traducción, acorde a lo vivido y la
respuesta al mundo.
Carmen Alarcón estudia en el Cultural Cabañas (posiblemente algún alumno de
Lara Gallardo o Jorge Navarro le dio clases) Expone en el Salón Guadalajara, en
sus momentos claves.
El Salón Guadalajara estuvo en Palacio Municipal. Desde su creación hasta su
clausura lo dirigió Gustavo Curiel Ballesteros. Fue sede de la obra de los
principales autores de la entidad. Carmen Alarcón estuvo presente con su obra.
El mundo corre. Los universos del conocimiento se amplían. Las circunstancias
parecieran reunirse entre latitudes. Sencillamente el mundo pequeño se comparte
en múltiples circunstancias.
Relieves fue un proyecto de Francisco Sandoval López, bastante interesante, en
la ciudad de Tepatitlán de Morelos, Jalisco. De nuevo ese acercamiento de la
naturaleza con el arte, digámoslo con propiedad, la esencia de lo humano.
Hablo en ese tono superlativo de bastante interesante por las cualidades de su
obra, por el sincretismo de la línea, por la conjugación de los lenguajes. Los libros
de artista.
Hago la noche prófuga/ de insomnios/ y lunas embriagadas/ así la lluvia/ se
diluye en silencio. La lluvia resbalando por la suavidad del cuerpo del individuo,
carne madera de la especie.
En 1998 el reconocimiento a su obra con la beca FECA, de Jalisco por el trabajo
Relieves de Ahuehuete, un año después en el Festival de la Leche, organizado
por el CUALTOS, de la UdG.
Se habla de Talla en Madera, exposición en la Escuela Nacional de Antropología
e Historia en la ciudad de México, el año del 2002, además de Relieves de
Francisco en el Festival Unidos por el Arte de La Piedad Michoacán el año de
2014.
Francisco Sandoval López comenta de su obra: “Partí de las raíces, de la
madera del río, de la hoja en blanco y del terco ensimismamiento. Están ustedes,
mi gente transparente y la implacables embriaguez del universo en puerta.
El año de 1990 asiste al taller de Carmen Alarcón. La historia misma se conjuga
en ese universo ampliado. Los acontecimientos, las propuestas, la visión del
mundo en circunstancia.
“La paradoja oculta de mi condición humana la que inventé en mi origen: el arte
desde las raíces de los ahuehuetes y el grabado del taller” la voz del artista con su
mundo.

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