Generalidades
José Roque Albín Huerta*
Ante la adversidad, la bondad
Entrevista a Alberto Emmanuel Fernández Campos, joven profesionista de 29 años de edad actualmente laborando en una universidad como asesor de inscripciones formando futuras y presentes generaciones, cuéntanos en que consiste tu trabajo: mi motivación diaria son el recuerdo de las palabras de mi padre Juan Fernández que me decía “hijo si quieres más que los demás debes hacer y esforzarte más que los demás” a lo largo de mi formación académica me enfrente a diferentes retos ya que desde preparatoria trabajaba cantando en los camiones para pagar mi colegiatura y ayudar en los gastos de mi casa.
Cuando ingrese a la Universidad, fue más difícil ya que vivía con mi abuela mis tíos y primos siendo 13 personas en la casa pues mi padres se fueron vivir a Guanajuato para aprovechar una oportunidad laboral , y a pesar de que recorría 42 km diarios en mi bicicleta para ir a trabajar y llegar a la facultad mi motivación siempre fue el buen ejemplo de mi familia que me decía que no me rindiera, veía la meta de graduarme cada vez más cercana , y aunque fue difícil con tareas infinitas, obligaciones interminables y problemas económicos constantes la vida me tenía preparado otro reto aun mayor, pues mi padre que me motivaba por tantos años a seguir adelante con sus palabras de sabiduría y su buen ejemplo, lamentablemente falleció a un año de graduarme de la carrera.
Lo anterior, devasto a mi familia a mi madre y hermana a lo cual pensé en dejar de estudiar para dedicarme a cuidarlas, pero mi madre me decía que lo más importante es la educación, trabajar con una sonrisa, hacer las cosas bien y tratar a los demás como te gustaría que traten a tus seres queridos, estas palabras me acompañan aun hoy en día para así con una actitud de servicio y cordialidad tratar a mi semejante siempre con respeto y humildad.
Trabajando así día con día sin importar las diversidades y las pruebas constantes que la misma vida nos ponía una y otra vez, al fin cuando me pude graduar no fue garantía de que todo estaría bien pues fue cuando la pandemia del Covid nos azoto duramente a nuestra economía mundial y también cambio el estilo de vida tal como lo conocemos, es aquí, precisamente que, encontré el trabajo que actualmente tengo de asesor de inscripciones en una universidad donde fui conociendo el proceso de admisiones y que al igual que yo muchos jóvenes y no tan jovenes luchaban diariamente por salir adelante con su educación con esas ganas de vivir, de ser.
Ahora bien, a los aspirantes que puedo ver en mi trabajo les platico un poco de mi experiencia pues el verlos con la cara llena de ilusión con todas las ganas de comerse al mundo les doy ese pequeño empujón que necesitan para tomar su decisión de estudiar y de formarse como profesionistas que no solo tendrán un mejor futuro para sí mismos y para sus familias, sino que también apoyaran a la sociedad mexicana que tanta falta le hace la educación constante.
Seguro estoy que todos podemos poner nuestro granito de arena para contribuir para los demás como en su momento lo hicieron con nosotros o bien si en el momento nadie nos echó la mano y fue difícil intentar atravesó de nuestras acciones que los demás no tengan que pasar por eso y ofrecerles una sonrisa para cambiar su día malo por uno mejor cambiar las emociones negativas por una sonrisa , en mi trabajo aplico lo que le llamo el valor de la sonrisa, ya que una sonrisa no puede ser comprada, no puede ser robada, solo se puede entregar de manera voluntaria a los demás y si es sincera se te devolverá con creces ya sea de manera inmediata o en el futuro.
Es por ello querido lector que te invito a que tú también sonrías y lleves como tu estandarte la buena voluntad de quererle sonreír no solo a tu día o al a vida misma, si no a ti mismo que te hará ser más grande con los demás y contigo mismo siendo una persona de bien que ayuda, que a pesar de las adversidades o de cómo te traten los demás siempre sigas sonriendo pues uno sabe que lo mejor está por venir.
es rector general del Centro Universitario Uteg*.
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