Saltar al contenido

No nos desgarremos

Roque Albin Huerta
Compartir en:

Generalidades

Roque Albin Huerta

No nos desgarremos

El conflicto es inherente entre las personas, es la historia del ser humano, pues responde a la necesidad filosófica de buscar la verdad y una vez hallada defenderla.

Desde inicio de los tiempos la diversidad ideológica ha desembocado en indeseables separaciones familiares, rupturas amistosas o, inclusive guerras devastadoras.

Es verdad que el conflicto ha generado, en muchas de las veces, progreso; es cierto que Roma con el filo de su espada y el terror de la guerra otorgó seguridad política y el derecho a los pueblos sojuzgados.

Nació también el derecho a la igualdad de todos los ciudadanos y principalmente el resurgimiento de un espíritu de libertad, mismo que formó la base de la organización en el mundo actual y con ello el respeto a la diversidad de ideas.

Desde tiempos remotos se ha sabido que las personas demuestran en diferentes ámbitos y situaciones sus gustos, sus emociones o bien su apasionamiento.

El apasionamiento se deriva de la palabra pasión y es comprendida normalmente como un sentimiento muy intenso de algún tipo, que se experimenta hacia una idea, una cosa o una persona.

Quienes llegan a experimentar dicho sentimiento pueden volverse irracionales, es decir no entran en razón alguna y trae grandes consecuencias si no se tiene la capacidad de analizarlo y controlarlo. Hay que defender nuestra ideología, pero es muy importante “Saber escuchar”.

Citaré ejemplos muy coloquiales para llegar a comprender mejor hacia donde quiero llegar, habrá a quienes les agrade viajar en barco y a otros en avión; o a quienes les agrade el color azul marino y otros prefieran el negro; o si nos enfocamos en el hogar, unos prefieren pollo y otros carnes rojas.

No debo pelearme con quienes no estén de acuerdo conmigo porque para mí es mejor viajar en avión que en barco porque optimizas tiempo; para mí el color negro es más sobrio y elegante que el azul, que las carnes rojas tienen más sabor que el pollo; tendría miles de argumentos para convencerlos pero debo respetar sus gustos, no puedo ni debo obligarlos a que piensen como yo.

En el ámbito donde se percibe un gran apasionamiento es en el futbol, se ha sabido a través de los medios de comunicación que este deporte trasciende la barrera de la amistad, es más hasta de la cordura. Nos percatamos con infinita tristeza que ha ocasionado graves accidentes, se han roto los huesos y hasta
muertes ha habido porque cada quien defiende el color de su equipo, pues dicen traer la camiseta bien puesta, eso está bien solamente hay que tener cuidado de no caer en el fanatismo porque esa ideología no favorece la relación en ningún ámbito.

Hay que disfrutar el futbol o cualquier deporte sin apasionamiento ni fanatismo, se sabe que hay muy buenos jugadores de balón pie, que ellos cambian el color de su camiseta si les ofrecen mejores ganancias, ¿los espectadores también cambiarían de equipo? Pero si se tiene una firme ideología eso no es motivo para
cambiar el color de la camiseta.

Apreciable lector estimo en todo lo que va, su tiempo para leer mi aportación y en este caso, el mensaje va con el propósito de que no nos enemistemos con nadie ya que nuestro equipo de preferencia ni cuenta se dará de que somos sus fieles seguidores. Dicen que al buen entendedor pocas palabras.
[email protected]

Tal vez te puede interesar Escenificación del Viacrucis en Guadalajara cautivó a miles de asistentes

👋
Suscríbete al boletín

buzón

Noticias Actualizadas por e-Mail

¡gracias por leernos!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *