El senador del Partido Acción Nacional (PAN), Miguel Ángel Yunes Linares, rechazó las acusaciones de “traidor a la patria” lanzadas por la oposición tras anunciar su postura sobre la reforma judicial. Durante su intervención en el Senado, Yunes Linares aseguró que no ha cedido ante presiones ni negociaciones y que su voto reflejará su convicción personal.
El exgobernador de Veracruz asumió su curul como senador suplente luego de que su hijo, Miguel Ángel Yunes Márquez, solicitara licencia para ausentarse por motivos de salud. Tras rendir protesta, Yunes Linares afirmó que la libertad legislativa es fundamental y que es antidemocrático atacar a un legislador por ejercer dicha libertad, ademas mencionó que no le gusta la democracia rebaño, votar sin antes analizar a fondo las propuestas de reforma. Estas declaraciones respondieron a las críticas y sospechas que han rodeado la salida temporal de su hijo, lo que ha generado rumores sobre un acuerdo con Morena.
La ausencia de Yunes Márquez ha sido vista con desconfianza por parte de algunos sectores de la oposición, quienes especulan que podría haber facilitado un acuerdo para favorecer a Morena en la votación sobre la reforma al Poder Judicial. Esta desconfianza llevó al presidente del PAN, Marko Cortés Mendoza, a advertir sobre la posible expulsión de Yunes Márquez si se alineaba con el partido oficialista. Cortés hizo un llamado a los legisladores de su partido para mantenerse firmes y actuar con valor en la discusión sobre la reforma judicial, exhortando a Yunes Linares a actuar conforme a los principios del PAN.
Acusaciones de amenazas y presiones en la votación de la reforma judicial
La jornada en el Senado ha estado marcada por denuncias de intimidación hacia senadores del PAN, quienes alertaron sobre presuntas presiones provenientes del oficialismo para forzar votos a favor de la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Senadores de la oposición afirmaron haber recibido amenazas desde varias instancias, incluyendo fiscalías, con el objetivo de influir en el resultado de la votación.
El foco de la controversia se centró en la ausencia de Yunes Márquez, lo que incrementó los rumores sobre un posible pacto entre la familia Yunes y Morena. A pesar de las especulaciones, la secretaria general de Morena, Citlalli Hernández, insinuó que es muy probable que Yunes Linares apoye la reforma judicial, una medida clave para la administración actual. Con 85 escaños controlados por Morena, el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde (PVEM), el bloque oficialista necesita solo un voto adicional para alcanzar la mayoría calificada requerida para modificar la Constitución.
Los senadores del PAN, ante las sospechas de negociación, exigieron a Yunes resistir cualquier presión del oficialismo, en tanto que la senadora Lilly Téllez manifestó su indignación, recordando que “la patria es primero”. Asimismo, Movimiento Ciudadano (MC) denunció actos de intimidación en Campeche, donde señalan que familiares de legisladores han sido detenidos, supuestamente como parte de un “acuerdo oscuro” para asegurar votos contra la reforma.
El presidente López Obrador ha instado al Senado a aprobar la reforma lo más pronto posible antes de dejar su cargo, la cual ya fue avalada por la Cámara de Diputados la semana pasada. De ser aprobada, México implementaría elecciones populares para jueces y magistrados a partir de 2025, una medida que ha recibido críticas de organizaciones internacionales y socios comerciales de Norteamérica.
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