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Observando

Patricia Alvarado

Guadalajara, Jalisco. El sexenio del presidente López, va en camino de terminar como el más violento del país, el presidente se enarboló en su campaña de “abrazos no balazos” y se le salió de las manos la seguridad y el orden del país.

Muchas personas hacen burla y diversión de los “abrazos, no balazos” pero el tema de seguridad va más allá de una campaña publicitaria de seguridad, porque el Plan de Seguridad del sexenio va en el contexto del establecimiento de la Guardia Nacional y la Armada para reorientar fuerzas armadas, coordinar nacional, estatal y regionalmente la seguridad del país y los lineamientos de operación, todo ello para que el combate a la delincuencia fuera eficaz, se trataba de prevenir y combatir delitos en todo el país, sin embargo es innegable que la delincuencia, la violencia y el crimen organizado está ganando terreno en México entero.

López Obrador en su diatriba diaria señala que los “conservadores” quieren boicotear su gobierno, que el “compló” sigue estando a la orden del día y de su vida.

Lo cierto es que el sexenio se le está cayendo a pedazos, aunque la encuesta nacional del El Financiero señala que tiene el 56% de aprobación en su gobierno, encuesta que se realizó a mil 100 personas adultas, con una desaprobación del 43 por ciento.

A últimas fechas el mandatario mexicano ha dado muestras de un “humanismo” que raya en lo grotesco, en días pasados en su “mañanera” se le cuestionó sobre los cinco jóvenes desaparecidos en Lagos de Moreno, Jalisco y a lo cual respondió con una risa sardónica de que no escuchaba: “no oigo” respondió para luego contar un chiste machista y soltar la carcajada.

Se ha vuelto constante que el presidente López, no escuche, no oiga a las personas mexicanas en sus peticiones o reclamos: no escucha a las madres buscadoras, no escucha a la niñez con cáncer, no escucha a las mujeres y así se podría ir enumerando diferentes casos donde no escucha, no oye, lo cual raya en burla nacional para las personas gobernadas.

México, vive uno de los momentos más críticos de su historia, ya había 43 jóvenes desparecidos con el expresidente Peña, ahora se suman ene cantidad de jóvenes hombres y mujeres desaparecidos en el gobierno actual, donde las más de 110 mil desapariciones de personas y los más de 137,895 muertes violentas reflejan un país adolorido y fragmentado.

La corrupción y la impunidad que impera en la nación son el reflejo de un país sumido en el desgobierno con respecto a la seguridad pública.

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2 pensamientos sobre “No oigo”

  1. En este país vivimos entre la violencia, la corrupción y la impunidad, cada día es más difícil vivirlo, aquí han pasado casos tan terribles como los asesinatos de los niños de la guardería ABC, pero como era una prima de la esposa del presidente en turno, no hubo justicia, solo rodaron cabezas menores y se acabó, los 43 de Ayotzinapa al día de hoy lo mismo, todos sabemos q el ejército estuvo involucrado y?……..en este sexenio de abrazos y no balazos cifra récord de desapariciones y asesinatos, y?……..ataques con explosivos de uso militar, secuestros masivos, uso de drones artillados y?……. Solución?…..pedir a la entidad espiritual en la q creamos para q nosotros y nuestros seres queridos regresemos sanos y salvos a casa cada dia, no hay mas

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