PARA QUE SE ENTERE
Blanca Nieves Palacios Barreda
El muy reconocido y respetado ex guerrillero, José Mújica, ex presidente de Uruguay y senador, en diferentes ocasiones ha expresado, en los foros en los que ha participado que: “la política, no es una profesión, sino una responsabilidad, se debe pagar, no cobrar por ese honor”; afirma que: “la importancia de la sociedad es conservar a la civilización que, podemos coincidir, ser semejantes, pero no idénticos”; ha reconocido que: “en política a veces hay que tragar sapos”.
Por su parte el ingeniero Heberto Castillo, quien llegara a destacar como líder del movimiento de 1968 y por su defensa de Petróleos Mexicanos (Pemex), quien diera inicio a su carrera política de la mano del padre de su alumno, Cuauhtémoc Cardenas Solórzano, el expresidente de México, Lázaro Cárdenas del Río, de quien fue secretario particular (1956), habiendo sido, diputado (1985-1988) y senador (1994-97) y diputado federal diría que: “el gusto de ser diputado dura cuatro años, pero la vergüenza, dura toda la vida”,
Gran razón existe en las palabras de estos dos personajes, es algo que los mexicanos hemos conocido a través de la historia, desde los tiempos pos revolucionarios y los que nos ha tocado vivir a las nuevas generaciones, y pareciera que antes que mejorar y superar los problemas que han detenido el progreso de nuestro país, tener un bienestar en beneficio de todos los mexicanos y tengamos una mejor civilización y una mejor convivencia, la corrupción institucionalizada por los gobiernos padecidos por mas de ocho décadas, hoy rebasan lo inimaginable.
Mucho mas se seguirá hablando de ello; cada día crecerá mas la indignación de los ciudadanos, la indiferencia entre otros, la apatía, para no llegar a ser cómplices silenciosos de este enorme desorden político en éste, que se ha venido convirtiendo en una verdadera guerra mediática que, raya en la desvergüenza, en el cinismo, el oportunismo vil, y diciéndose todos, ganadores de gubernaturas, diputaciones, presidencias municipales, en estas elecciones de 2021, a la que han llamado: “las elecciones más importantes de la historia de México”, algo más absurdo publicitariamente hablando, no podrían decir.
Los sempiternos poderosos, dueños del dinero y los manejos políticos en México, tras la ruptura con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), buscan desde diferentes medios de derrocarlo, porque ha dado a conocer en sus mañaneras, todas su evasiones fiscales y demás corruptelas, hechas al amparo del poder, tanto político como económico, pero todo eso, los mexicanos lo hemos sabido siempre, y lo que hemos esperado es que se aplique la ley, porque un evasor fiscal de miles y hasta billones de pesos evadidos, merece la cárcel, lo mismo quienes hicieron reformas para entregar nuestras riquezas, desde la energía eléctrica, petróleo, gas, aguas, minería, pesca, islas, agricultura, ferrocarriles, carreteras.
Y en esta lucha han optado los oligarcas neoliberales, utilizar a una institución que, debería ser garante del respeto del voto de los mexicanos, el Instituto Nacional Electoral (INE), cuyos presidentes, consejeros, han burlado al pueblo y manejado las elecciones a su antojo; claro debemos de tener que, en esta vida, todo tiene su tiempo, su espacio y su lugar y, cuando, desde la Secretaría de Gobernación, Manuel Bartlett truqueó el resultado de las elecciones en beneficio de Carlos Salinas de Gortari, y desde Patrocinio González, Emilio Chuayffet, José Woldenberg, Luis Carlos Ugalde Lorenzo Córdova Vianello, que han violado cuanto han podido los procesos electorales y, se han burlado de grupos de indígenas por reclamar sus derechos, tal como lo hizo Córdova Vianello, inmediatamente deberían ser destituidos, por el Congreso de la Unión, pero bien sabemos que todos son parte de ese mismo juego perverso en el que han convertido a la política.
Estupefacta la ciudadanía, ante tal pleito pre electoral, hoy no sabe a quién defender, si al INE, a los partidos y la pregunta corre en boca de todos los posibles votantes, ¿por quien votar, si todos son la misma porquería?, dándose vuelo con sus reelecciones; candidatos denunciados como violadores; candidatos miembros de sectas dedicadas a la pornografía; candidatos saqueadores de universidades públicas; Yeidkol Polevnsky, denunciada por el desvío de mas de mil millones de pesos, designada como candidata plurinominal; alianzas entre partidos de lo más reprobable; candidatos que, sin pertenecer al Partido Morena, están ocupando la mayoría de las posiciones plurinominales y de representación popular, así como presidencias municipales y hasta gubernaturas.
Ante este desprestigio del INE, de los partidos, del congreso y los candidatos, ¿Qué decisión es la que los ciudadanos deberemos tomar, a fin de salvar a México de tanta corrupción y podredumbre?